Colores para la cocina en 2018

Las cocinas son el centro de la casa y un lugar donde pasamos mucho tiempo, preparando comidas o disfrutando de ellas, conversando sobre una taza de café o empleando el espacio para otras actividades como revisar facturas o vigilar como los niños hacen los deberes.

En el diseño de cocinas actual destaca el uso del color, tanto en fondos como en el mobiliario o los electrodomésticos. Según el enfoque que deseemos dar a nuestra cocina podemos optar por tonos más sutiles y tranquilos o por otros más llamativos y energéticos.

Una de las apuestas más seguras y comunes es la combinación de grises y marrones. El gris funciona muy bien con cocinas situadas sobre suelos de parquet o con mobiliario realizado en madera, pudiendo aplicarse en paredes y superficies como encimeras o en acabados de elementos como la campana o el frigorífico. Se trata de una combinación que resistirá bien el paso del tiempo.

Otra combinación que funciona muy bien tanto en cocinas modernas como tradicionales es el verde con platas. Una elección ideal para los amantes del los acabados en acero inoxidable. El verde suaviza el frío del metal y le da al conjunto una apariencia más acogedora.

Para aquellos que buscan una alternativa más vibrante la combinación de blanco y rojo es una opción poderosa y muy efectiva en estilos contemporáneos con lineas sencillas. Dado lo llamativo del tono no es necesario utilizar mucha superficie roja para conseguir el efecto y podemos limitarnos aplicarlo zonas como los paneles traseros de la cocina.

Podemos conseguir una cocina de aspecto mas tranquilo utilizando azul, un tono que combina especialmente bien con negro, aplicado en las superficies horizontales del espacio. Esta combinación encaja igual de bien en espacios modernos como en cocinas rurales.

El negro también se puede combinar con blanco para obtener una de las parejas más clásicas y atemporales que podemos encontrar en el diseño de cocinas y no por ello menos elegante.