Cenar en el exterior
El buen tiempo es ya una realidad en nuestras vidas, con la llegada del verano podemos sacar partido a nuestros balcones y terrazas, ampliando el espacio habitable de nuestra casa. Las comidas o cenas en el exterior son uno de los encantos de los meses estivales, veamos algunas ideas para organizar el espacio.
El primer paso es ser realistas acerca del espacio disponible, si podemos introducir una mesa lo recomendable es que ocupe el menor espacio posible, pero que pueda desplegarse en caso necesario. De este modo podemos celebrar una comida pero también utilizarla cerrada para tomar un café o jugar a las cartas.
Todo el mobiliario debe estar garantizado para soportar el sol, la lluvia y el viento, es sorprendente lo rápido que envejece los objetos en el exterior, los cojines de zonas de asiento también deben estar realizados en tejidos adecuados por mas que siempre tengamos la precaución de guardarlos dentro.
Nuestro balcón también es un espacio a tener en cuanta para cultivar hierbas que después podemos incorporar a la comida. En función del espacio disponible podemos incluso introducir brotes para ensalada o unos tomates cherry. Deberemos asegurarnos de que nuestros cultivos tienen nutrientes y agua suficientes además de un adecuado drenaje. Lo ideal es una zona soleada, especialmente si recibe el sol por la mañana, también podemos acompañarlas de otras plantas, como las caléndulas o las capuchinas, que ademas de ser también comestibles nos darán un plus decorativo.
Instalar una barbacoa en el exterior es el mejor reclamo para realizar cenas veraniegas, pero debemos asegurarnos de una correcta colocación para que el humo no inunde nuestra casa o a nuestros comensales, ademas de las regulaciones que pudieran existir en la comunidad.
En un plano quizás algo menos funcional, debemos de pensar que elementos podemos incluir para dar al espacio la atmósfera deseada. Este es un buen monto para jugar con piezas coloridas (una hamaca, un cubo o una lámpara). También deberíamos planear una iluminación adecuada para las noches, y no tiene por que ser nada complicado, unas simples bombillas suspendidas pueden ser todo lo que necesitamos para crear un espacio mágico.
A la hora de servir la comida lo normal es utilizar nuestra cubertería habitual, si no deseamos invertir en platos o vasos con una estética más veraniega siempre podemos añadir un toque distinto introduciendo elementos naturales en la mesa, como un centro floral o unos cantos rodados para sujetar las servilletas.