El cine en casa
Si somos de los que nos tomamos muy en serio nuestras sesiones de cine casero y siempre estamos buscando formas de mejorar la experiencia, independientemente de adquirir el último y mayor aparato de televisión, podemos fijarnos en algunos sencillos ajustes para disfrutar de nuestras películas favoritas con mayor comodidad.
El primer paso, si es que no lo tenemos ya resuelto, es optimizar la relación de la pantalla con la zona de asientos. Probablemente tengamos un lugar favorito cuando vamos al cine, algunos prefieren sentarse muy adelante y que la pantalla ocupe todo su campo visual y otros prefieren las zonas de atrás para no marearse al sentir las imágenes tan cerca. Sea cual sea nuestra situación perfecta la idea es recrearla en nuestro salón y mover los muebles o la televisión de forma apropiada.
Si vamos a tener invitados para nuestra sesión de cine debemos asegurarnos que cada asiento tiene una correcta y cómoda visión de la pantalla, así como un lugar accesible para dejar bebida y comida, lo último que queremos son líquidos derramados sobre nuestro sofá.
Sobre los aperitivos e imprescindibles palomitas la mejor idea es utilizar vajillas desechables de cartón para que la tarea de limpieza sea fácil y rápida. Otra buena idea para evitar accidentes con las bebidas es utilizar botellas individuales en lugar de vasos, que siempre resultan mucho más fáciles de derramar.
En cuanto a la tecnología una adquisición interesante y de bajo coste que puede mejorar la experiencia notablemente es una barra de sonido, con una sencilla instalación ganaremos una notable calidad de sonido sin necesidad de un complejo home cinema. Ahora, si realmente nos tomamos en serio nuestras sesiones de cine puede que debamos empezar a plantearnos comprar un proyector y así convertirnos en auténticos profesionales.